Viajo hacia el concepto de lo humano
Conceptos pasean por la atmósfera de quien lo busca,
serán vacilantes, rebalsarán en confusión en la joven impaciencia,
el fracaso de aquel vaso que endiosó lo impalpable
en reemplazo de su imprecisión. Invisibles, mas cognoscibles.
El olvido es su muerte. Pero la memoria prodigiosa
no le garantiza la existencia. Las enseñanzas han bebido de él,
los manuscritos han sido anfitriones,
y el desvencijado papel, un eslabón que lo una en el campo mental.
Las lenguas del mundo se renuevan en la descoordinación
de un concepto: la búsqueda de lo que nadie busca.
Y en campos desiertos rige el imperativo de las masas
robotizadas: lo disponible es la exclusión de lo posible.
Ha de comenzar la exploración, reviviendo el futuro de lo ignorado.
Nos ahogamos si salimos de sus inocuas aguas, sobreviviendo
a la infección que enjaula al conocimiento fuera de las celdas,
privándolos de lo "imposible", mientras seres
(que en algún momento fueron humanos)
liberan el silencio entre rejas disonantes
con su naturaleza. Viaje contra la marea, es huir
desesperadamente. Quizás, nos encontremos en el concepto,
en la palabra, en el verbo.
Comentarios
Publicar un comentario